Después de un mes en la tormenta, Atenas acomodó la estantería y con Ezequiel Palma como nuevo presidente busca dejar atrás el escándalo por las apuestas
El miércoles 3 de diciembre de 2024, cuando Estudiantes se volvía hashtag por la detención de su presidente Alicio Dagatti, Atenas le ponía fin a una novela que lo convirtió en trending topic. Ezequiel Palma fue electo presidente del club para tomar la posta que dejó Federico Felippa, quien cerró su mandato con una investigación a cuestas por apuestas ilegales y arreglo de partidos.
La imagen de Dagatti detenido fue como esa piedra que hace mirar hacia otro lado al perro guardián. La dirigencia de Atenas pudo tener una asamblea tranquila, sin el ruido mediático que acompañaba al club desde finales de octubre, cuando el fiscal Franco Pilnik ordenó allanar los domicilios de Felippa y otros dos integrantes de la comisión directiva.
Más allá de la cuestión judicial -hoy sin novedades-, el oficialismo en Atenas consiguió salir del brete sin demasiadas marcas. Alejó fantasmas de intervención, llamó a elecciones, entregó el mandato a término y consiguió seguir en la conducción con nombres nuevos, pero afines. Deja al equipo masculino de fútbol en su mejor ubicación histórica y al femenino como campeón anual de la Liga Regional. Además, agrega a sus méritos las mejoras en la infraestructura del club.
Pero para conocer el impacto que tuvo el affaire apuestas en la vida institucional del club habrá que esperar. ¿Qué piensa la gente que no votó en la asamblea pero va a la cancha? ¿Se reducirá aún más la cantidad de gente que va a la cancha? ¿Seguirán acompañando? Son algunas de las preguntas que surgen a futuro.
De hecho, que no haya habido una lista de oposición a la presentada por el oficialismo puede ser una muestra de desencanto. Que no hayan estado en la asamblea no quiere decir que apoyan a esta comisión. Puede ser que no hayan visto otra opción o que simplemente no quieran saber nada con los destinos políticos del club. Si es así, Atenas está en problemas.
El desafío para la comisión que preside Palma será recuperar la imagen del club. La mancha de la investigación iniciada por Pilnik no se borra fácil ni para el afuera ni para el adentro. Ver al escudo de Atenas asociado a la palabra “apuestas” en la mayoría de los sitios periodísticos del país no es algo que se olvidé. Así, no se tratará solo de sumar más gente, sino de volver a convocar a los que se fueron. Por lo pronto, el fin de año y lo que pasó en avenida España, trajeron un poco de calma.
Del Autor
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