Cuestión de Imperios

El deporte tuvo una fuerte impronta en los procesos de colonización. En India, por ejemplo, el críquet encontró un lugar en el cual crecer

El proceso de independencia de la India es uno de los más interesantes. La manera en que los hindúes se libraron del yugo inglés es uno de los símbolos de la descolonización en Asia. Pese a todo, una de las costumbres que dejaron los ingleses en aquel superpoblado país, fue el críquet.
Si bien en India el criquet es un deporte bastante popular, su origen no tiene nada que ver con las tradiciones de esa cultura. La disciplina fue llevada allí por quienes conquistaron esos territorios durante el proceso de expansión europea: les ingleses. Primero fueron los marineros ingleses los que lo jugaban y luego se sumaron les colones. Al principio, les europeos eran les úniques que tenían acceso a los clubes para poder jugarlo.
El nacimiento del críquet se ubica, según la historia oficial, en Inglaterra alrededor de los siglos XIV y XV, aunque hay registros que indican que podría ser anterior. Para el siglo XIX la disciplina era considerada una de las principales en el imperio británico. Era considerado el deporte que más representaba los valores de la cultura inglesa. En algunas de sus colonias, les misioneres impulsaban su práctica para que les colonizades tuvieran un lugar en el cual gastar algo de energía y de paso, adquirir algunos de los rasgos de la British Culture.
Con el correr del tiempo, el críquet fue transformándose en las distintas colonias. Dejó de ser el deporte que jugaban les blanques mientras les demás miraban. Los procesos fueron distintos según las colonias. En India, primero pasó a ser jugado por las elites locales y luego -independencia de por medio- se volvió más popular. Allí, el criquet dejó de ser un símbolo de los valores británicos y pasó a convertirse en un terreno de disputa, en el cual se puede vencer a los conquistadores. De ahí que los hindúes festejaran eufóricamente el triunfo ante los británicos en la novela.
Otro de los lugares en donde el críquet tuvo un gran impacto fue en las colonias británicas caribeñas. Por ejemplo en Trinidad y Tobago. Allí, luego de la independencia, el deporte dio lugar a una nueva disputa simbólica, no ya ante les colonizadores, sino entre los dos grupos étnicos que componen la población de la isla. Les afrotrinitenses y les indotrinitenses.
En algunas de las ex colonias británicas el críquet, más allá de una disciplina, es un ámbito en el cual se ponen en juego cuestiones históricas, étnicas e identitarias. Por eso los hindúes festejan cada carrera que hacen los suyos ante los ingleses, como los argentinos celebraron los goles de Maradona en el ´86.